Mientras hago cola para pagar unos vestidos, entra en mi campo de visión una madre con un bebé- al cual hago carantoñas casi automáticamente- en un carrito precioso. La mamá es joven, no tendrá más de veinteseis años... Es curioso, hace unas décadas eso sería lo más normal, para mí hoy en día, es una situación extraña. De pequeña te imaginas que con esa edad ya estás casada y con hijos, pero cuánto más se acerca, más te das cuenta de lo poco preparada que estás. Me encantaría tener una situación fija y estable ahora mismo como para poder establecer una familia, pero... todavía soy tan joven, tan inmadura, ¡no puedo ocuparme de mí misma cómo lo voy a hacer con otra persona, que además se puede romper muy fácilmente! Sinceramente, la gente que tiene hijos jóvenes, las madres de antes... ¿estaban realmente preparadas para ser madres? ¿Cómo les daba tiempo? Sacudo mi cabeza mientras miro distraidamente las hileras de zapatos que hay en la tienda... A parte de todo eso, no entiendo cómo les daba tiempo a descubrir a la persona adecuada. A lo mejor, es que está sobrevalorado, pero me he pegado contra tantos cantos ya... ¿será que la gente antes era menos exigente y acertaban a la primera? Eso me lleva a pensar a mi querido Mr.5B... El otro día me pasó otra cosa rara (cuándo no) con él. Cuando me levanté al día siguiente de llevarle la pizza, me encontré el plato vacío -y limpio- con una tarjetita encima que decía "Muchas gracias, P.R.". Tal cual; ni un saludo, una mención a la exquisitez de mi cocina, ¡nada! Ahora mi pensamiento estaba volando otra vez a velocidades no adecuadas, imaginando los apellidos de nuestros hijos... ¿Qué significará R.? ¿Cómo voy a planear los nombres si ni siquiera sé si pegarán? Me he fijado en el buzón y pone un apellido distinto, seguramente del antiguo propietario de la vivienda, que todavía no lo han cambiado... No sé en qué momento he llegado a volverme tan neurótica, se deberá a que no tengo muchos entretenimientos lately; dentro de poco me voy a sorprender dibujando corazoncitos con nuestras iniciales dentro y planeando los horarios de sacar a pasear al perro... Debería volver a mis clases de yoga, me sentía más equilibrada cuando hacía el saludo del sol...
She lives with an orange tree
The girl that does yoga
Got a wolf to keep her warm
When he comes over
And she gives
I get
Without getting anything to me
jueves, 6 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Lo del perro me suena a mi... jajaja
ResponderEliminar