lunes, 27 de septiembre de 2010

Beautiful Mess

A quien madruga Dios le ayuda... ¿quién inventaría esa horrible frase hecha queriendo consolarse? A lo único que ayuda madrugar es a asegurarse una muerte precoz... Desde siempre he sabido que no soy una chica de mañanas. No, las mañanas no son lo mío, levantarme antes del amanecer... no way. Siempre me las he apañado para no entrar a mis lugares de trabajo a primera hora, porque lo sé. Es perjudicial para todos. No hay manera de que pueda rendir por mucha cafeína que me haya inyectado de modo intravenoso. No funciono. Con un par más de horas de sueño mi rendimiento se ve triplicado. Todo el mundo lo sabe. Si me levanto pronto, parezco un dragón enfurecido despeinado y zombie resoplando con peligro de caerse de un momento a otro. Y eso ha pasado hoy, tenía una vista a las 8 de la mañana. Por favor, ¿a quién se le ocurre poner esas horas? ¿Que cunde el día? ¡Ja! Aquí tienes el resultado, me he levantado con profundo dolor, he intentado ducharme para despejarme, al salir quería morirme del frío, he ido en albornoz a la cocina y al ir a llenar el cazo de la cafetera lo he tirado todo por el suelo, he pensado que lo recogería más tarde... por supuesto, mis reacciones con todo el sueño que tenía era como poner un video de Tai-Chi a cámara lenta, al final he decidido ponerme lo primero que he encontrado de ropa (lo he tenido que hacer dos veces porque me había puesto los pantalones del revés, algo que no me había sucedido nunca) y salir a la calle visto que en mi casa sólo conseguía causar destrozos. He decidido bajar las escaleras andando, para despejarme otra vez, casi me mato y me llevo por el camino al cartero... ¡Las farolas todavía estaban encendidas! Me he subido a mi moto, que no arrancaba, obviamente porque había olvidado hacer contacto; después de casi ser atropellada un par de veces he llegado al lugar de destino, donde he cogido uno de esos asquerosos cafés ingleses para llevar... resultado, por fin estoy en mi despacho, y una vez más, me acabo de despertar de encima de unas carpetas con un post-it de Luke en la mejilla.

I can't think straight
I can't concentrate
This morning I put salt in my coffee
I put my shoes on the wrong feet
I'm losing my mind I swear
It might be the end of me

domingo, 26 de septiembre de 2010

My Life Would Suck Without You

Hace un rato que se ha ido Nikki de Manchester; había venido a pasar una semana conmigo y la he terminado de la peor manera que he podido... mea culpa... la situación, una vez más, se me ha ido de las manos. Y es que sigo sin entender cómo puede ser tan caótica mi existencia, estoy volviendo de dejarle en el aeropuerto, con un sentimiento extremadamente amargo. Nuestra existencia está ligada de una manera inquebrantable y lo sabemos ambas, pase lo que pase, siempre ha sido así. Sin embargo, eso no quita gravedad al asunto. Siempre he pensado que el sentimiento de culpabilidad es muchísimo peor que el de ser herida, porque sabes que eres tú la que lo ha fastidiado todo y la que ha causado el daño; de modo que al sentimiento horrible y triste de la situación, añades el hecho de sentirte una basura a nivel de persona. Sólo espero que me perdone y que todo vuelva a su lugar, al correcto... es increíble como aquello que más quieres, cuya existencia es la más frágil es lo que más destruyes sin ser consciente y en un solo momento con un conjunto de palabras inapropiadas e hirientes. Al dirigirme hacia el portal, me he encontrado un gato negro mirándome quieto fijamente... llegas tarde amigo, creo que deberías haberme avisado antes.

Maybe I was stupid for telling you goodbye
Maybe I was wrong for tryin’ to pick a fight
I know that I’ve got issues
But you’re pretty messed up too
Anyway, I found out I’m nothing without you
Cuz we belong together now
Forever united here somehow
You got a piece of me
And honestly.... my life would suck without you

viernes, 3 de septiembre de 2010

Situations

Volver a la rutina no es fácil, ciertamente no lo es. Poco a poco, van incorporándose todos al trabajo; vuelves a ver a la gente tras un tiempo y sientes como si la tarde anterior te hubieras tomado un café con ellos. Sí, CAFÉ, eso que es prácticamente imposible conseguir en este maldito país; o te pasas al té, o te pasas media vida buscando un buen bar italiano tradicional donde no te sirvan una mezcla de agua con polvos de color marrón. Eso me ha pasado esta semana, cuando yendo a desayunar me he topado con que mi asidua y siempre fiel cafetería estaba cerrada. para siempre. jamás. local en alquiler. No es difícil imaginarse cómo ha transcurrido mi mañana: malas caras, gruñidos, restregones de hojos y algun que otro cabezazo.
Sin embargo, no todo ha sido negativo... mientras sorbía esa sustancia líquida oscura con tres sobres de azucar que- a pesar de parecerlo por fuera- seguía sin saber a café, disfrutaba de la inigualable compañía de mi querido Max. Hemos mantenido una interesante conversación, muy inspiradora, como siempre, que me ha hecho adoptar una mentalidad más optimista y ordenar un poco mis ideas. Es curioso, como cuando una persona aparece en tu vida, empiezan a amontonarse todas de golpe. Obviamente, he visto a Luke; eso no ha sido coincidencia ya que trabajamos en el mismo despacho... lo que sí ha sido coincidencia ha sido que me llevara a casa e invitara a tomar unas cervezas más tarde. Al llegar a casa y abrir la puerta había una notita en el suelo, que claramente había sido pasada por debajo de la puerta. Efectivamente, era Patrick avisándome de que había llegado a Manchester y que esperaba encontrarme en el ascensor para que charláramos de nuestros veranos... sonrío complacida y halgadada. Alrededor de diez minutos después, Gabriel ha llamado por teléfono; he charlado con él mientras me hacía la cena y la verdad, ha sido very refreshing; me ha comentado que estuvo en Reino Unido una semana, pero no vino a Manchester porque sabía que estaba fuera. Pffff... observo mientras me pongo el zapato derecho que todavía tengo una pila de correo al lado de la tostadora para afrontar este fin de semana, o el siguiente. Timbre, Luke está abajo esperando para que nos contemos el verano en un pub, ¿quién sabe? a lo mejor se está poniendo las pilas y todo...

Situation Number one
Its the one that's just begun
But evidently its too late

Situation Number two
Its the only chance for you
It's controlled by denizens of hate

Situation Number three
It's the one that no one sees
All too often dismissed as fate

Situation Number four
The one that left you wanting more
Tantalized you with its bait